Cinco movidas políticas tras el poder de Cleopatra

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Recordamos la vida y las estrategias de una de las más sagaces políticas de la historia.
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Cleopatra, la ponderosa del Nilo

La reconocida actriz Elizabeth Taylor interpretó a Cleopatra en la superproducción de Twenty Century Fox de 1963. La película fue una de las más costosas de sus tiempos, y obtuvo cuatro premios de la Academia. Imagen: Fotograma de la película Cleopatra, 1963.

La leyenda presenta a Cleopatra como una mujer de una gran belleza física, que hacía caer rendidos a los hombres; pero los historiadores contemporáneos indican que fueron los romanos quienes se encargaron de presentarla a la historia de esa manera, para desdibujar su verdadero protagonismo. Ella fue realmente inteligente, habilidosa y poderosa, una mujer que supo cómo moverse en las complejidades de la política internacional de sus tiempos.

Presentamos las cinco principales movidas políticas de esta poderosa faraona, que la posicionaron como una autentica diosa viviente, la poderosa mandataria que puso incluso a tambalear el vigor del imperio romano.

1. Paciencia y lealtad estratégica a la espera del poder.

Ella fue la tercera hija del emperador Ptolomeo XII, y gracias a la paciencia y lealtad con su padre, consiguió ser la auténtica heredera al trono. Su hermana mayor Berenice IV, apoyada luego por su hermano Arsinoe IV, se fueron contra su padre, aprovechando que este tenía muy mala reputación entre sus súbditos, que lo consideraban déspota y poco justo. Lo expulsaron de su propia tierra, pero a la vuelta de unos años, Ptolomeo XII rearmó su ejército, consiguió apoyo de Roma, retomó el poder y mandó a ejecutar a sus hijos traidores. Así, Cleopatra quedó de primera en la línea sucesoral y tomó el poder a sus 18 años, tras la muerte de su padre, quien dejó en su testamento el poder conjunto para Cleopatra y su hermano Ptolomeo XIII, con quien debía contraer matrimonio.

2. Preparación académica y acercamiento al pueblo.

Su familia, la dinastía ptolemaica, en el poder egipcio durante más de dos siglos, era de origen griego. Ptolomeo I, general de Alejando Magno, tomó el poder tras la muerte de este. Pero esta dinastía ejerció siempre el poder manteniendo sus costumbres y cultura helénica. Cleopatra fue la primera gobernante que dominaba a la perfección el idioma egipcio, lo que le permitió una relación más directa con su pueblo. Se dice que era una mujer erudita, que hablaba siete idiomas, interesada en la cultura, la matemática, la literatura, las ciencias políticas, la astronomía y la medicina. Herramientas que la protegieron en el trono y que le dieron ventajas en las relaciones internacionales.

3. Control de su propia imagen.

Estas habilidades intelectuales fueron el verdadero origen de su poder de seducción, que supo además administrar haciendo un detallado y cuidadoso manejo de su imagen personal. Sabía presentarse de acuerdo a cada momento, según los públicos que tendría. Por eso, los historiadores indican que su verdadero aspecto es un enigma, pues las representaciones que hay de ella de la época son totalmente diferentes unas de otras: esto era parte de su estrategia. Así, por ejemplo, en la imagen de las monedas, se hizo presentar con el mentón prominente, una característica de su padre, que la legitimaba ante el pueblo como autentica heredera. En otros momentos, ante el pueblo, se dejaba ver vestida como la diosa Isis, o ante sus ejércitos como una guerrera.

Le gustaban los lujos, sabía rodearse de ellos, y utilizarlos para elogiar y seducir a otros gobernantes, pero también para darle a su pueblo demostraciones de poderío.

Escena de Cleopatra, en la que Burt Raynolds (Marco Antonio) y Elizabeth Taylor (Cleopatra) comparten en el set de grabación. Durante el rodaje estos dos actores sostuvieron un escandaloso romance.

4. Astucia en el manejo de las relaciones internacionales, en particular con el imperio.

Cuando Cleopatra recibió el otrora poderoso Egipto, realmente lo encontró deslucido y decadente, tras las luchas internas de más de un siglo; a tal punto que era poco más que un protectorado de Roma, convertida en imperio, un poder ante el cual las opciones eran intentar derrotarla, o lograr seducirla.

Poco después de que asumió el trono, su hermano Ptolomeo XIII —de tan solo 12 años— al que estaba unida en matrimonio por un requisito impuesto por su padre en el testamento, se levantó en contra de ella y la destronó. Pero ella supo alinearse con el gobernante del imperio, Julio César. El resultado fue la Guerra Alejandrina, en los años 48 y 47 a. C., en la que murió Ptolomeo XIII y se devolvió el trono a Cleopatra.

5. Ambición de crecimiento y expansión de su territorio y su poderío.

Después de la guerra, Cleopatra, estableció una relación afectiva con el César (extramatrimonial), con quien tuvo un hijo, Cesarión. Hasta ese momento Julio César solo tenía hijas mujeres con su esposa. Este se convirtió en una carta primordial para buscar restablecer la hegemonía de Egipto sobre el Mediterráneo oriental como aliada de Roma.

Sin embargo, el asesinato de Julio César, ocurrido en el año 44 a. C., nublaba su camino. Ante este panorama repitió la maniobra de seducción con Marco Antonio, uno de los potenciales sucesores del César y que entró en lucha con Octavio Augusto por el poder en el imperio. Con él también tuvo hijos, tres, respaldo para la protección de Egipto por parte del poderoso militar.

Sin embargo, esta vez se alineó del lado de los perdedores, pues en el año 31 a. C. Octavio derrotó a Marco Antonio, quien a pesar de refugiarse en Alejandría —al lado de Cleopatra—, perdió todo su poder y honor, al punto que tomó la decisión del suicidio.

Cleopatra y Julio César, interpretados por Elizabeth Taylor y Rex Harrison, en la película dirigida por Mankiewicz. Imagen: fotograma del trailer de Cleopatra, 1963.

Cleopatra buscó repetir su maniobra seductora con Octavio Augusto, pero esta vez no le funcionó, él la rechazó, con la intención de apresarla para exhibirla ante sus enemigos como un trofeo de guerra. Ante esta posibilidad, ella optó por el suicidio, a la manera egipcia: por la mordedura de una serpiente cobra. Su hijo mayor —con Julio César— fue asesinado. Sus hijos con Marco Antonio fueron criados por la viuda de este, y con el tiempo se convirtieron en gobernantes de pequeños reinos entregados por Octavio.

 

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