La sensibilidad que debe tener la política

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Detrás de cada persona, hay una historia que relata las anécdotas y experiencias que han contribuido al desarrollo y construcción de una personalidad, que hoy en día con pequeñas y grandes acciones quiere aportar al crecimiento cultural y político de nuestro país.

En aquellas anécdotas encontramos altibajos y grandes momentos que nos han enriquecido en este proceso. El objetivo principal de esta misión es construir con acciones una política justa y transparente para todos, a traves de historias que han marcado grandes experiencias. 

Gracias a la vida, tuve los mejores abuelos paternos, los que me dieron el cariño y me alcahuetebaan cada cosa que al “Mono” se le antojaba. Por cosas de la vida, mi abuelo paterno presentó graves problemas de salud y el “Mono” salió a las calles para aprender a trabajar y tener como salir adelante, buscar recursos para continuar su proyecto de vida, que con el pasar de los años se fue ajustando.

Vendiendo tiras para brasier, bolsas y aguacates, logré despertar una energía imparable para hacer cada cosa que me proponía, conocer diferentes lugares de la ciudad, aprender de todo y participar en proyectos laborales con la comunidad de Niquitao, Bello Oriente en Santo Domingo, llegando incluso al municipio de Calamar en el departamento del Guaviare. De este modo fui encontrando que mi misión es servir para construir.

Me inspira la política sincera, incluyente, objetiva, de seres humanos sensibles; por años he tenido contacto con diferentes personalidades de la política y siempre analicé los aspectos menos relevantes, pero que para mí, son fundamentales en un líder político; un líder que esté atento a las necesidades sin importar si eres o no amigo, un líder que te conteste una llamada telefónica; si te dio su número de contacto, es porque quiere servir, que te conteste un mensaje de WhatsApp, que responda un correo, esas cosas mínimas debe tener hoy un líder político para que pueda generar credibilidad, confianza y empatía con un electorado.

El problema de los políticos que lograron identificar que esos pequeños detalles marcan la diferencia, es que se les olvida que a todo en la vida hay que hacerle mantenimiento preventivo; Seguir visitando las calles y la comunidad, trabajar en los territorios un porcentaje importante de su agenda, que su periodo sea casi como continuar en campaña, creo que es por eso que se elige, porque se debe estar presente para vivir y conocer la realidad y de esa manera tendría valor ser un líder político. Los cargos públicos demandan jornadas extensas, días, semanas, meses y años de mucho trajín, pero no podemos olvidar que si se fue elegido y se logró el triunfo, fue gracias a esos pequeños detalles y a un plan de trabajo articulado, que generó valor, permitiendo que se tomaron la tarea de leer sus propuestas y votar, o votaron por el simple hecho que creyeron.

Generar confianza, credibilidad y empatía, creo que son las verdaderas estrategias políticas que se deben construir y se deben liderar desde las bases primarias que llamo yo, (Representantes estudiantiles, líderes comunitarios, líderes empresariales, entre otros) que permitan crear una red similar o igual a un multinivel, para que sus ideas lleguen a cada rincón, para que cada proyecto logre el impacto que debe tener y para que nadie se pierda de poder vivir una política real e incluyente.

Hoy fallan muchas cosas, que para mí no deben ser en la política; ¿agarrarse por Twitter? No tiene sentido, discutir por redes sociales a mensajes de oposición, que lo único que buscan es eso, que usted responda y se desestabilice, porque con solo responder, es prueba de que incómodo y genera algo en usted.

Este país requiere de mensajes que promuevan la vinculación de la población a los diferentes proyectos, programas escenarios de participación, y que se perciba hasta la más mínima gestión de un líder político.

¿Cree usted que, con llenar las redes sociales de discusiones, seremos más fuertes y líderes? Yo no lo creo, solo dividimos, agredimos a la sociedad, a los que se detienen a leer una red social, porque cada que lo hacen, es porque buscan un espacio de dispersión, encontrando odio, violencia, engaños y gran cantidad de cosas que afectan indirectamente las emociones de las personas.

Lo anterior es un punto muy pequeño dentro de un universo más grande, el otro punto a conocer es la otra vida real, la calle, los territorios, las personas que no tienen acceso a las redes sociales, o porque no tienen recursos o porque no les interesa o porque simplemente no saben ni qué es Twitter o Instagram, esas personas que solo viven del voz a voz y que como teléfono roto, todo le llega distorsionado y como el otro lo quería ver o entender.

Es hora de tener una visión holística, integral, que llegue no al que siempre tenemos presente que le debe llegar, porque ese siempre se las ingenia para enterarse, debemos llegar a esos que no se involucran que votan porque otro le dice por qué quiero y punto, porque cree en el vecino, vecina o amigo, “como él si se mantiene metido en ese Facebook, ese si se entera de todo” entonces votemos por ese.

La responsabilidad es nuestra, no podemos seguir diciendo que es casi imposible llegar a todos los territorios, que únicamente dependen de nuestra sensibilidad y deseo de servir, pero si solo se enfoca en los intereses mediáticos y los que me haga ver más grande, creo que se desdibuja la misión real del líder político, su misión está en servir a TODOS y se logra si la red tiene una estructura clara desde una comunicación y direccionamiento asertivo.

El tamaño e impacto de tu servicio, está en el tamaño de tu sensibilidad, es la que se ha perdido, pero nunca es tarde para recuperarla.

Mauricio Andrés Herrera Arboleda

#ServirParaConstruir

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